El CIPRODEH condena el uso excesivo de la fuerza y la criminalización de la protesta de las y los estudiantes
El Centro de Investigación y Promoción de los Derechos Humanos (CIPRODEH) fue testigo este viernes cuando las fuerzas de seguridad del Estado ingresaron a la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), y capturaron a seis estudiantes, que realizaban una protesta en apoyo a sus compañeros y compañeras que estaban siendo sometidos a una audiencia de descargo.
Las y los seis universitarios fueron trasladados a bordo de una patrulla policial a la Dirección Policial de Investigación (DPI) acusados por el delito de privación de libertad, supuestamente en contra de los guardias privados de la Universidad, pertenecientes a la Empresa de Seguridad Privada del Aguán S. de R.L. (ESPA). Esta versión fue negada por los y las estudiantes y por los mismos guardias que fueron abordados por los organismos de derechos humanos que se encontraban en el lugar.
Los elementos policiales ingresaron al edificio de Química y Farmacia, violentando la autonomía de la UNAH y privaron de la libertad a los y las estudiantes sin presentar una orden judicial y sin ser acompañados de un juez ejecutor, como lo estipula el Código Penal.
El equipo humanitario del Centro, constató además cómo los elementos policiales lanzaron bombas lacrimógenas en los edificios de Ciencias Médicas y sus alrededores, afectando a los y las estudiantes y personas ajenas, incluyendo tercera edad y niños y niñas que recibían atención por parte de los y las estudiantes que realizan su práctica profesional en el área de la salud.
El CIPRODEH fue testigo también del traumatismo emocional y físico al que fueron sometidos los y las estudiantes que se encontraban recibiendo sus clases de rutina y a quienes daban acompañamiento a los y las 23 compañeros que este viernes estaban siendo sometidos a una audiencia de descargo, luego de haber sido sometidos a un proceso judicial mediante el cual han sido acusados por los delitos de daños y privación de la libertad.
El pasado 7 de junio el Tribunal de Sentencia de Tegucigalpa condenó a los estudiantes, Cesario Padilla, Sergio Ulloa y Moisés Cáceres por el delito de usurpación. Esta acción ha sido reprochada por varias instancias de los derechos humanos nacionales e internacionales.
El CIPRODEH, como organismo promotor y defensor de los derechos humanos, exige a las autoridades de la UNAH y a los órganos operadores de justicia que respeten el debido proceso de los y las estudiantes capturados este viernes y los procesos que se le siguen a los demás.
Asimismo insta a las autoridades universitarias a que protejan el derecho a la vida, integridad física, libertad, seguridad y el derecho a la protesta que tienen los y las estudiantes, e insta a las partes involucradas a que, en medio de este conflicto, establezcan un diálogo franco y sincero.